HOMBRE NECESARIO PERO NO INDISPENSABLE
Jesús Nuestro Señor y María Nuestra Madre se dirigen a la humanidad:
En ésta fecha que se aproxima, el Pueblo de Mi Hijo
celebra su nacimiento, celebra el Amor Verdadero, aquél que no se separa jamás
de los suyos… Mi amado Hijo habita en cada criatura y ama tanto al hombre que,
esa fuerza de Amor Divino, no le permite vivir separado de él. La mayoría de
Mis hijos aprovecha ésta fecha para disfrutar de las distracciones que el mundo
ofrece, sin elevar una oración o realizar un buen acto y continúan destronando
a Mi Hijo, cuando todos, en la unidad de Mi Corazón, deben abocarse y unirse
para ofrecer sus actos por el bien de las almas sin descanso.
¿CUÁNTAS ALMAS DESEAN ESTRECHAR EN SUS BRAZOS A MI NIÑO, ADORARLE Y
REPARAR?
Mi Hijo nació con el dolor como compañero suyo y siendo
el Dueño de los universos, padeció hasta redimir a la humanidad en medio de ese
dolor. Mi amado Niño nació participando
a toda la humanidad de los rayos de su Divinidad, compartiéndoles su Amor
Divino, su inteligencia y su Voluntad Divinas, pero las generaciones lo han
despreciado y estos prodigios de Amor han sido sepultados por el mismo hombre;
solo unos cuantos lo han tomado como herencia. Desde su nacimiento, derramó su
Divinidad para todos los tiempos, dio su Amor y Misericordia para todas las
generaciones, anticipó una Iglesia Santa según su Voluntad y a través de almas
elegidas, continúa explicitándose.
¡COMO MADRE LES LLEVO EN MI CORAZÓN!
Bendigo sus hogares en ésta Navidad, en especial a Mis
hijos, a esos que viven con la lámpara colmada del aceite de la Voluntad
Trinitaria. Mi Bendición para toda la humanidad, para todos aquellos que aman a
Mi Hijo, le obedecen, obran y actúan en su Voluntad, pero también, para quienes
no le reconocen, no le aman y le desobedecen: ¡SOY REFUGIO PARA TODOS, TAN SOLO PÍDANLO! Sean
manantial inagotable de Amor y fe, no se desanimen, continúen en medio de la
tormenta adorando a Mi Hijo, pero sobre todo, actuando en la Voluntad Divina.
Desde Mi Vientre, Mi Divino Hijo envió Luz sobre la
humanidad lo mismo que Gracias y Virtudes a todas las criaturas, hasta a los
más acérrimos pecadores que se sumergen en tenebrosas cuevas… Mi Jesús hace
todo esto para convertir a las almas y para que no se pierdan, pero no ha
obtenido respuesta de los hombres, sino indiferencia y desprecio:
Mira a su Iglesia
indiferente frente a las modas indignas y sacrilegios que en Ella se cometen…
Algunos de Mis hijos predilectos en su obrar y actuar, no dan a conocer ni dan testimonio de Éste Niño
humilde y en algunos de ellos, la ligereza con
que celebran la Eucaristía, es un clavo que atraviesa las Sagradas manos
de Mi Hijo. ¡DEBEN
REPARAR LOS PECADOS DE ÉSTA GENERACIÓN, SUS INGRATITUDES Y MALICIA! El
pecado se ha introducido en las criaturas hurtándoles la voluntad y les mantiene
cegados para que no reaccionen. ENCUENTRO TANTAS
ALMAS QUE SON COBARDES: No ofrecen
resistencia a las tentaciones, viven en total desorientación; unas y otras caen
de inmediato como si el pecado fuese un acto natural.
¡NECESITO ALMAS SEDIENTAS DE MI VOLUNTAD!
El hombre crece y Me ama de Verdad cuando su voluntad
disminuye, porque la cerrazón que tiene es precisamente ésta que
cual imperio, se ha levantado sobre Mi Querer siendo el mayor tropiezo para que
alcancen las Bondades de Mi Casa: ¡Acojo
a los hombres de buena voluntad, a los que se anulan a sí mismos para derribar
su yo humano y se fusionan a Mí para respirar, moverse, hablar, sentir y
existir absolutamente en Mí!
En Mis asuntos, en Mi Misión, TODOS SON NECESARIOS MÁS NO INDISPENSABLES y quien sienta lo contrario, mirará Mi Corazón
colmado de almas que claman y piden llegar a Mi servicio: ¡NO DESEO QUE ME ADOREN POR APARIENCIA SINO EN
ESPÍRITU Y EN VERDAD! siendo fuertes,
firmes y decididos; no deseo palabras vacías y un corazón mentiroso, como
tampoco quiero mentes ignorantes de la infinitud de Mi Amor y de la grandeza de
Mi Justicia.
Cada criatura humana debe disponerse a ser un mártir por
Mi causa y una voz de esperanza de Mi Segunda Venida… Quienes Me adoraron fueron los que estaban bien dispuestos aunque todos
eran pecadores y algunos, en demasía, pero los transformé por su buena
disposición. En Mi transitar y en el de Mis Profetas, deseo de esas almas
que no se bajen de la barca en las tormentas y sean el soporte de la Vela para
alivianar los embates de las mismas.
No son instantes para quienes sean tibios de corazón ni
de decisión, ni en predicar la Verdad y auxiliar a Mis Profetas, porque por
Amor Nací en un Pesebre y Me Entregué en el Trono más excelso, la Cruz; desde
Mi Cuna miré a todos y Bendije a aquellos que desprecian el ego por el servicio
a Mi Casa; prediqué ante los Doctores de la Ley y su arrogancia les llevó a
señalarme y despreciarme, y siendo inocente como la mayoría de los mártires,
fui condenado.
Los Doctos y los no Doctos escudriñan Mis llamados para
derribarlos, no Soy creído y Mi Madre tampoco, pero aun así, Me mantengo dentro
del Pesebre del corazón humano; solo Soy mirado de vez en cuando y son pocas
las almas que Me mantienen con abrigo y se compadecen de Mi dolor, en tanto Mis
Profetas anuncian el AVISO para ésta humanidad y por ello, son burlados
y desacreditados. Así como los pastores, almas de buena voluntad, fueron
inundados por Mi Amor y acudieron a éste llamado, acudan ustedes siguiendo la Estrella de Mi
Voluntad para que no se pierdan ante los Herodes del presente que
miran a Mi Pueblo con intenciones de llevarles a caer en el abismo eterno donde
no existe retorno.
Llamo al cambio, a un nuevo camino de unión Conmigo,
porque el tiempo no es tiempo y la justicia de la Mano de Mi Padre, no se hace
esperar, precisamente por Misericordia para las almas. La Misericordia mantiene
su principio en Mí como fuente inagotable… Como Padre debo advertir a los Míos
para que no se pierdan y escuchen Mi Palabra como voz que clama en el desierto
de la mente humana.
¡LES AMO, MI BENDICIÓN SOBRE TODOS LOS HOMBRES, ATESÓRENLA!