¡RECHACEN EL MAL Y RECONOCERÁN AL ENGENDRO!
Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen
María
Para la humanidad:
HIJOS AMADOS, CÓMO SE HAN CEGADO…
¡Sean buscadores
de Mi Amor, sean fieles, no sigan a la sociedad que no se entiende a sí misma!…
¡Les he dado ojos, no continúen ciegos!... Vivan la vida interior, retomen la
oración del Santo Trisagio, es bálsamo para Nuestra Trinidad ya que igual que
en el pasado, ustedes no atienden a Mis pastores fieles que les hablan con la
Verdad, desatienden y niegan a Mis profetas, niegan a Mis verdaderos
instrumentos pero aceptan a quienes niegan lo que tienen ante sus ojos.
EL ANTICRISTO CAMINA EN MEDIO DE USTEDES Y NO LE RECONOCEN
PORQUE SE HAN FAMILIARIZADO CON EL MAL:
El hombre posee facultades para pensar, pero en un solo
instante, el demonio les puede tomar y llevarles a ser verdugos de sus
hermanos… No deseo mirar en Mis hijos, criaturas saturadas de odio, rencor,
ambiciones, insatisfacciones, incoherencias, maldad, ira, prepotencia, falta de
fe y soberbia… La soberbia, en
un instante, logra que un alma se pierda y hace de un gran hijo de Mi Hijo, la
más pequeña e indeseable de las criaturas, rebajándole hasta arrastrarse por el
suelo… Invita a los celos, a la prepotencia y a la exigencia, opacando los
sentimientos y toda consideración… La soberbia envenena
a la criatura humana en contra de sus hermanos e invade de soledad al hombre
amargándole como la hiel… Y es que algunos, deseando anticiparse a la siega y
arrancar la cizaña sin mirarse a sí mismos, lo que hacen es dejar sin trigo los
campos.
ÉSTE INSTANTE ES UN HILO QUE PENDE DE UN MOVIMIENTO
PARA ROMPERSE:
No deseo que alguno de Mis hijos sea de los que van a
romper ése hilo conduciendo a la humanidad al padecer desmedido y continuo de
todos en forma general y, especialmente, de manera personal, a quienes
rivalizan dentro de las comunidades que se han formado dentro de la iglesia de
Mi Hijo, puesto que el mal carcome también a los grupos, robándoles el amor de
unos hacia otros, abalanzándoles en luchas internas para derrumbar las obras de
Mi Hijo
EL MAL Y SUS TENTÁCULOS.
Algunos esperan la aparición de los tentáculos del mal,
pero éstos ya dejaron de ser tentáculos y se han transformado en armas con las
que el engendro del mal ha dominado a la humanidad, esclavizando al hombre
mayor para que éste entregue a la juventud sus creaciones y que a su vez, los
adultos entreguen a la niñez lo que la tecnología ha creado por orden de esos tentáculos malignos… Ésta generación
se mueve en un círculo de vicios, todos a favor del mal y se mantiene en una escalada de violencia de la cual no
podrá salir… El mal lidera a las grandes
potencias ya que éstas le darán criaturas humanas para esclavizar y someter
bajo sus órdenes.
LOS RETRASOS DE LA HUMANIDAD:
La humanidad se mueve mirándose a sí misma sus labores,
sus estudios, su trabajo, sus posesiones, sus deseos, sus proyectos… ¡Eso es
bueno!... ¡Sí!... Solo que los apegos desmedidos a las cosas transitorias, al
materialismo, al yo humano, dejan en un segundo lugar todo lo que es bueno como
la caridad, la esperanza y la fe del plano espiritual e igualmente les detienen
en el camino hacia Mí, llevándoles a mantenerme en el último lugar y a no
escuchar Mi Voz debido a sus propios intereses… Solo que, no deben olvidar la
época de Noé donde todos bebían, se alimentaban, trabajaban y demás, pero se
burlaban de él tildándolo de loco pues desconfiaban de la cordura de éste
hombre que preparaba cómo salvar a su familia y sufría por los que no se
salvarían… Mas cuando llegó la lluvia y ésta no se detenía, aunque corrieron
hacia el arca, ya no pudieron entrar en ella y ésta generación pereció….
EL MAL INCRUSTADO:
Y es que en las criaturas humanas que viven alejadas de
Mí se infiltró el mal y éste va creciendo como un árbol al que cada instante le
colocan abono… El hombre no se percata de lo profundo en que se enquista el mal
para causar división, intriga, desconfianza y separación, por lo que lamentarán
quienes dudan de su existencia cuando se pose frente a ellos y tengan que
cumplir sus órdenes, convirtiéndose en sus servidores… ¡La humanidad sufrirá el
gran flagelo, resultado de la ira y del dominio del mal en el hombre!... Ante
su propia ira, la criatura humana no se comprende a sí misma porque no se
ordena a sí misma.
MÍRENSE POR DENTRO EN ESPÍRITU Y EN VERDAD
ANTES DE QUE SEAN EXAMINADOS POR USTEDES MISMOS:
El aviso les dará la Gracia de auto examinarse y
entonces sentirán el peso de lo indebido que han realizado en la vida y el de
lo bueno que han dejado de hacer… Ninguna criatura humana logrará excluirse de éste instante, excepto
los inocentes que serán tomados en los brazos de Mis ángeles para que no
padezcan… Mi
Padre Les dice, frente a éste Gran acto de Misericordia: Vengan a cumplir Mi
Voluntad… Si lograran mirar el camino que llevan, temerían caminar
en la voluntad humana que les lleva a caer en el mal.
¡Caminen por la senda que Les he trazado y que he
caminado por ustedes con anterioridad!... ¡Obedezcan, no se resistan, no se
nieguen siguiendo sus propias decisiones!... ¡Caminen en espiritualidad obrando
y actuando en Mi Voluntad para que sean cumplidores firmes y decididos de
cuanto Les solicito!... ¡Qué será del pueblo que desconfía de Mí!... ¡Les llamo
a vivir a Mi manera y cuántos se niegan por desconfianza!...¡No continúen viviendo según ustedes mismos el cómo desearían que fuese todo, porque eso sería mentira y el
vivir en la mentira es privarse de la oportunidad que Les brindo de alcanzar la
vida verdadera y vida en abundancia.
CORRUPCIÓN HUMANA:
El hombre es corruptible y un gran veneno de ésa
corrupción es el que constantemente vive tratando de encontrar respuestas
espirituales dentro de un ser humano que no es espiritual, dentro de una
criatura humana que Me ofrece oraciones sin que éstas lleven impregnado el
amor, la entrega, la obediencia, la humildad, la fe y la esperanza… Y es que se
mantienen en un constante detente al no vivir en Mi Voluntad… Solo que ustedes
no son solo carne, son alma y espíritu también, por lo que poseen sentidos
espirituales de los cuales deben hacer uso para que los sentidos del cuerpo
sean diferentes y se unifiquen Conmigo queriendo hacer el bien… ¡Sean bien y
generarán bien.
